Correr es vida

 

Chema Martínez

 

Primera edición en esta colección: abril de 2011
 Segunda edición: enero de 2012

© Chema Martínez, 2011

© del prólogo, José María Álvarez-Pallete, 2011

© del epílogo, Dani Martín, 2011
 Fotos del interior: archivo del autor y de Runner’s World

© de la presente edición: Plataforma Editorial, 2011

Plataforma Editorial

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Diseño de cubierta:

Jesús Coto

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© de la fotografía de la portada: Rafa Gómez

Fotocomposición:
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Depósito Legal:  B.24.682-2012

ISBN EPUB:  978-84-15577-26-3

 

 

 

 

 

«(…) cualquier acción que se haga cada día, por banal que sea, acaba adquiriendo una naturaleza contemplativa.»

H. Murakami
 
De qué hablo cuando hablo de correr

 

«[Emil Zátopek] no oculta la violencia de su esfuerzo, que se traduce en su rostro crispado, titanizado, gesticulante, continuamente crispado por un rictus que resulta ingrato a la vista.»

J. Echenoz

Correr

Contenido

Portadilla

Créditos

Citas

 

Prólogo

Aire, agua, tierra y fuego

Niké!

Cómo empecé con todo esto

Éxitos y fracasos iniciales

Lo que hay detrás del entreno

Mi día a día

La popularidad

Correr en altura

La emoción de Barcelona 2010

Persiguiendo sueños

El lado oscuro

Superar el fracaso

El atletismo como forma de vida

Cinco palabras clave

Run2Chema

Correr es vida

Epílogo

Fotos

Opinión del lector

Prólogo

 

Son las seis y cuarto de la mañana. Suena el despertador. Me levanto intentando no hacer ruido, me pongo la cinta del pulsómetro, las zapatillas y salgo despacio, muy despacio. Mi familia duerme.

Es una gélida mañana de invierno. En la calle hace un frío indescriptible y cae una ligera llovizna. Mi primer pensamiento es: ¿por qué? ¿Por qué me levanto a las seis y media de la mañana para correr? ¿Por qué he quitado horas a mi sueño sabiendo que me espera un duro día de trabajo? ¿Por qué?

Empiezo a correr, al principio suave, pero luego mi propio cuerpo impone el ritmo. Hoy no llevo música, prefiero pensar. Necesito el silencio. Percibo cómo mi mente y mi cuerpo se desplazan por separado. Mi cuerpo avanza dando zancadas, mi mente avanza pensando en otras cosas, pensando en lo que me preocupa.

Creo que no hay un porqué concreto. No hay una razón única por la que corremos. Cada uno lo hace por un motivo distinto. Unos por afición, otros para sentirse más jóvenes, otros para conseguir metas personales y superarse, algunos porque les relaja y otros porque les permite pensar…

Pero sí hay algo en común en todos nosotros. Sí hay algo que nos une a todas las personas que corremos: nos gusta correr. Disfrutamos haciéndolo. Nos hace sentirnos muy bien con nosotros mismos y cuando no lo hacemos, lo echamos de menos. Correr para nosotros es vida. Sí, definitivamente, correr es una parte de nuestra vida.

Conocí a Chema de forma casual, a través de Fran Chico, de la revista Runners (también una persona excepcional). Como os imaginaréis, le había visto muchas veces en la televisión y me había emocionado viéndole competir. Es difícil expresar con palabras lo que sentí, el pasado verano, cuando ganó la medalla de plata en Barcelona. Cada zancada suya, conforme se acercaba a la meta, era eterna, indestructible. Solo una persona que ha corrido maratones sabe lo que cuestan esas últimas zancadas. Pero verle a él, a ese ritmo, con ese calor, con esa fuerza, parecía irreal. Luego llegó la meta, su explosión de alegría, las ovaciones del público, el orgullo de ver nuestra bandera, la expresión de su cara, su sonrisa, su mirada. Momentos como éste hacen historia. Hacen que desees que se paren las agujas del reloj porque hay un mensaje grande detrás de su victoria: el esfuerzo y el trabajo, al final siempre tiene recompensa. Una recompensa que todos vivimos con él.

Por eso, para nosotros, Chema Martínez no es uno más. Chema representa todo aquello que nos gustaría alcanzar. Todo aquello con lo que soñamos. Es un deportista extraordinario en muchos aspectos. Es un gran campeón, pero es aún mejor persona. Es un gran atleta, pero es aún mejor ser humano. Encarna todo aquello a lo que aspiramos y a lo que, seguramente, muchos de nosotros nunca llegaremos: técnica, elegancia en la zancada, inteligencia en carrera, capacidad de sacrificio, planificación, éxito…

Tuvimos un encuentro y le ofrecí que se uniera a los Amigos de Proniño. No lo dudó un momento. Con él, la camiseta de Amigos de Proniño alcanza una nueva dimensión. Más de 211.000 niños de Latinoamérica te lo agradecen y te dan ánimo en cada competición, en cada entrenamiento.

A todos los que llevamos esa camiseta con orgullo, pensar que Chema Martínez corre con nosotros, que lleva la misma camiseta, nos obliga a ser mejores.

Por eso, cuando Chema me llamó y me preguntó si querría prologar su libro, me pareció increíble. ¿Cómo hacer un prólogo a un campeón? ¿Cómo expresar con palabras lo que admiro en él, lo que día a día nos enseña?

Chema dice en éste, su libro, que cuando corres el mundo se frena, se ralentiza. También dice que hay seis palabras clave para entender mejor por qué corremos. Sueños, compromiso, voluntad, disciplina, perseverancia y confianza. Nos hace, al mismo tiempo, reflexionar sobre algo muy importante: empezar a correr es una forma de responder a preguntas esenciales como por ejemplo: ¿qué buscas en la vida?, o ¿dónde está tu límite?

En momentos como el actual, cuando parece que el pesimismo gana, leer este libro ayuda porque nos recuerda todo aquello que es fundamental y no sólo me refiero al ámbito deportivo: sueños, compromiso, voluntad, disciplina, perseverancia y confianza son grandes valores que guían y deben guiar nuestras vidas.

Gracias, Chema, por este libro y por dejarme escribir en él. Es un honor mayor del que pueda expresar. Gracias por habernos dado tantos momentos de gloria, de alegría, de orgullo. Gracias por el ejemplo que das a tanta gente, por ser como eres. Gracias en nombre de 211.000 niños latinoamericanos que siempre te van a animar y que, con tu ayuda, van a ser muchos más.

Pero, sobre todo, gracias porque leyendo tu libro, comprendo mejor por qué madrugo, por qué corro, por qué me desespero cuando no puedo correr. He entendido que no corro para ganar a los demás. Corro porque me gusta. Corro porque como dices en el título de este libro: correr es vida y ya forma parte de mi vida.

José María Álvarez-Pallete

Presidente de Telefónica Latinoamérica